La película comienza con el pequeño JB de diez años deleitando a su ultra conservadora y religiosa familia con una versión roquera de Kickapoo, una canción escrita expresamente para la película con una letra que haría sonrojarse a cualquiera. Cuando su padre, quien cree que el rock and roll es cosa del diablo, se quita el cinturón y no muestra ningún signo de compasión hacia él rompiendo todos sus posters de rock, JB busca ayuda en Dio, uno de sus ídolos del rock. Dio le asegura que va por el buen camino pero que tiene que abandonar la casa de sus padres e irse a Hollywood para «encontrar los secretos de su arte».
